En esta obra hay humanxs que se hacen pasar por pájaros y pájaros que se hacen pasar por humanxs. Hay música, aleteos, cantos, gritos. Hay instrucciones para convertirse en un ave, avistamientos de una especie extremadamente rara, declaraciones de amor y proteccionistas de pájaros. Pero sobre todo hay juego, experimentación y un mundo con reglas propias. Un mundo donde las personas vuelan y las aves hablan. Un mundo donde la metamorfosis es la regla y el cuerpo y la voz son todo. Cuidado: se puede salir de la obra aleteando, con la cabeza hacia delante y lanzando al aire el canto pajarístico con el que unx se sienta más identificadx. Lo humano se deja en la puerta del teatro.
Captura de aves silvestres es una creación del Grupo Basamenta, compuesto por egresadxs de la EMAD. Actúan Nataly Cabovianco, Matías Corradino, Pilar Boyle —una de las protagonistas de La Pilarcita y la nueva intérprete de Ofelia en Ojalá las paredes gritaran—, Fernando Morales y Florencia González, con la dirección de Ignacio Torres. Hace diez años que se dedican a un tipo de experimentación colectiva anclada en la dimensión física, en la mímesis, en el trabajo con la voz y con lxs otrxs. Hay una atención especial al detalle y a lo cómico, pero el humor no surge del chiste, sino de un trabajo intenso y delicado de metamorfosis: de una forma de mirar, una forma de decir, de cómo se habita la piel —mejor dicho, el plumaje— de un pájaro exótico.
Ignacio Torres explicó: “Captura de aves silvestres es una obra que pone el foco en lo minúsculo —en el menor aleteo posible— y a la vez en la mayor cacería. En la obra una bandada emerge, donde no había nada, para destrozarlo todo”.
La obra se despliega de a poco, una bandada de actores-pájaro transforma la sala de un teatro independiente en un territorio casi mágico donde cualquier cosa puede pasar (pero qué es eso sino una definición del teatro, del tipo de teatro que esperamos ver cuando entramos a una sala). Acá no hay conflicto ni progresión dramática en el sentido clásico. Hay escenas fragmentarias y autoconclusivas donde lxs intérpretes exploran ese espacio incierto entre lo humano y lo animal, y juegan (es decir actúan) con maestría. La obra nos recuerda que nunca somos demasiado grandes para disfrazarnos y transformarnos en otrxs.
Y cuando las luces se apagan, lo único que se escucha es el aleteo de una bandada de pájaros imaginarios.
Ficha técnico artística
Autoría: Grupo Basamenta
Dirección: Ignacio Torres
Actuación: Nataly Cabovianco, Matías Corradino, Florencia González, Pilar Boyle, Fernando Morales
Vestuario: Maricel Aguirre
Diseño de escenografía: Jose Mehrez, Leandro Sartoretti
Diseño de luces: Leandro Crocco
Realización de escenografía: Leandro Sartoretti
Video y fotografía: Gastón Bejas
Diseño gráfico:Gastón Bejas
Entrenamiento corporal: Pablo Castronovo
Entrenamiento vocal: Lili Rossi
Asistencia de dirección: Meel Arcuri, Flora Gonzalez
Producción: Mariana Armelin