“…dicen que me fui del barrio…
¿Cuándo?
¿Pero cuándo?
Si siempre estoy llegando…”
Nocturno de mi barrio – Aníbal Troilo
Volver a las raíces. Si hay un regalo que el teatro puede hacernos, es el de encontrarnos con lo más humano en nosotros mismos, aquello que nos constituyó en quienes somos… con el cómo empezó todo.
A eso vuelve Osqui Guzmán con El Bululú, por partida doble, triple, o cuádruple.
Vuelve a los orígenes del teatro: el actor trashumante iba de pueblo en pueblo representando él solo todos los personajes de una obra.
Vuelve a un texto que marcó la escena teatral de los años 70, incomparable éxito en labios de José María Vilches; a aquel cassette del espectáculo que alguien le regaló cuando todavía era un actor en ciernes, para quedar “fascinado por esa voz. Parecía que escuchaba el mar, porque era impredecible su sonido y movimiento”. Vuelve a esos textos de Cervantes, Lope de Vega y Lorca, que cimentaron un actor y su memoria. A sus raíces bolivianas, a su historia argentina, a las huellas de España en nuestra cultura.
Vuelve, también, a aquel éxito que en el 2010 y 2011 le mereció los premios ACE, María Guerrero, Trinidad Guevara, Teatro del mundo, y un extensísimo etcétera. Con dirección de Mauricio Dayub, este reestreno se presentará los jueves a las 21hs en el Teatro Timbre 4 -sólo hasta fines de Noviembre-. No estaría mal, entonces, aprovechar y pegarse una vuelta.