Alejandro Ullúa es un Neil Armstrong nacional que clava la bandera argentina en esa luna que es Broadway. El autor y director nacido en Buenos Aires estrenó el 20 de abril en el Jan Hus Theater del off Broadway la adaptación de la obra que supo estrenar en 2011 en el Teatro Moliére y en 2012 en el Maipo Kabaret: Judy, un homenaje a Judy Garland. Con este musical (que en realidad es un espectáculo de teatro musical, no es una comedia musical), Ullúa escribe su nombre en la historia, al ser el primer argentino en estrenar una pieza propia en la avenida más famosa de Nueva York.
La obra es un recorrido por la vida de la actriz que encarnó a Dorothy en la versión cinematográfica de El Mago de Oz de 1939 (y fue madre de Liza Minelli en la vida real). A través de la interpretación de algunas escenas y canciones icónicas de la actriz americana, la historia se va tejiendo de la mano de un narrador (alter-ego de Ullúa).
La puesta en Broadway requirió cierta adaptación para hacerla potable para el público estadounidense y será la misma versión que se presentará en el Dublin Theater Festival. El Papa, y por ende los cielos, son argentinos, sólo nos resta reclamar los escenarios.
