“Una tarde de siesta en las afuera de la ciudad. Dos mujeres entrecruzan sus mundos transformando una charla casual en un campo de batalla, sin poder prevenir lo inevitable: una tragedia doméstica.”
La soledad, la trivialidad, el patetismo, los miedos.
El tuco, el perro, la remisería.
Mujeres solas a la hora de la siesta.
Mercedes y Mirna se dicen todo acorraladas en sus propias miserias. La cuarentona de chancletas y malla; la vecina gorda que sufre. Como en las obras breves de Tenessee Williams cruzadas por el grotesco, la esgrima verbal en las mujeres de Puig. Lo costumbrista, el inalámbrico, los repasadores. Los requechos para construir. La situación se espesa como la salsa en el fuego.
Hay un jardín proyectado en los fondos de ladrillos, los techos son árboles. Ruidos de bichitos de verano rodean a una cocina sacada de un cuento de nenas contado por Marcos López. Con su horno, su bacha y detergente, como si la hubieran transportado intacta para a amplificar cada gesto mínimo que sucede. En tiempo real se fríen cebollas y se prepara un tuco, que llena todo de olor.
Obras de relojería difíciles, las de dos personajes.
Mónica Raiola y Maruja Bustamante se actúan todo el hiperrealismo que promete la escena.
Una cajita musical perfecta con forma de cocina que da a un jardín.
La opera prima de Azul Lombardía gana en sensación, texturas, colores. Sin miedo al realismo, ese fantasma que nombramos sin saber muy bien qué es, nos mete de lleno en lo que tiene para contar. El teatro sucede en la frescura de esa experiencia.
Ficha técnico artística
Dramaturgia y Dirección: Azul Lombardía
Actúan: Maruja Bustamante, Monica Raiola
Escenografía: Santiago Badillo
Iluminación: Santiago Badillo
Diseño sonoro: Gustavo Podlischevsky
Este espectáculo formó parte de los siguientes eventos: Teatro en Construcción y Óperas Primas 2013